¿Quieres que tu negocio cuente con nuestras soluciones energéticas?
La matriz energética colombiana ya es relativamente limpia, pero se debe trabajar para que ganen participación otras energías renovables.
La transición a fuentes de energía más limpias y renovables es uno de los más difíciles retos a los que se enfrenta el mundo. Frenar el cambio climático y mitigar sus daños requiere reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la quema de combustibles fósiles.
Colombia no está exenta de este reto, y debe avanzar decididamente hacia un modelo energético más sostenible. A pesar de contar con una matriz energética relativamente limpia gracias a la gran participación de las energías hidroeléctrica y geotérmica, el país depende aún en gran medida de recursos no renovables.
El cambio hacia fuentes renovables plantea enormes desafíos, especialmente en lo que respecta a su viabilidad económica. La energía solar u otras alternativas son aún más costosas que las energías convencionales, lo que dificulta su adopción a gran escala por parte de empresas y hogares.
Los desafíos de la transición energética en Colombia
Uno de los principales retos de la transición energética en el país es que cada gobierno de turno considera que la transición energética es un pilar de su administración y no de la sociedad o del Estado, de acuerdo con Juan Manuel Morales, Gerente General de Empresas Gasco en Colombia.
«Lo que deberíamos tener no es una política de gobierno, sino una política de Estado», afirma. Para Morales, lo que Colombia realmente necesita es definir una ruta clara y coordinada entre los diferentes actores, más allá de los ciclos de gobierno. Solo de esta forma será posible alcanzar de manera realista los objetivos.
Otro desafío importante tiene que ver con los principales emisores de gases de efecto invernadero en el territorio nacional. Según el gerente general de Empresas Gasco, a diferencia de lo que suele creerse, las principales actividades contaminantes no son la industria o el transporte, sino la deforestación.
«La deforestación produce un golpe; si mis cifras no fallan, cerca del 60% de las emisiones de efecto invernadero son producto de esta actividad. Estamos hablando de que se dañan bosques y se desarrollan cultivos ilícitos. También tenemos ganadería extensiva en muchos territorios del país y no cuidamos el agua. En fin, tenemos una cantidad de cosas que causan un impacto negativo».
Relación costo-beneficio: ¿Cómo lograr una transición energética viable?
Para que sea viable, la transición energética debe encontrar el equilibrio entre sus costos y sus beneficios. Los esfuerzos por emplear fuentes renovables conllevan tanto oportunidades como barreras que deben evaluarse adecuadamente.
Barreras para adoptar las energías renovables
- Inversiones iniciales necesarias para la transición energética
Una de las principales barreras es el costo inicial de los proyectos de energías renovables. La instalación de paneles solares en una pequeña vivienda rural requiere una inversión de alrededor de 25 millones y 30 millones de pesos, según explica Morales. En el caso de las empresas, los costos no son muy distintos.
La recuperación de estas inversiones puede demorar varios años, lo que dificulta que las empresas decidan emprender este cambio. Por ello será importante que las tecnologías limpias se hagan más económicas.
«La tecnología tiene que volverse más asequible. Creo que vamos hacia allá. Si esta conversación la hubiéramos tenido hace cinco años, seguramente nos demoraríamos mucho más. Y aunque la tecnología ha mejorado, hay efectos como el aumento de la tasa de cambio o la crisis de la covid que han aumentado el costo de los insumos», asegura.
- Dependencia de los subsidios a los combustibles fósiles
Otra barrera importante en la transición energética Colombiana es la dependencia de los subsidios a los combustibles fósiles, como el diésel y la gasolina. Al respecto, Juan Manuel Morales afirmó que mientras el diésel y la gasolina estén subsidiados, las energías verdes no serán competitivas.
El Gerente General de Empresas Gasco explicó que actualmente el precio de estos combustibles es artificialmente bajo gracias a los subsidios otorgados por el Estado. Esta medida desincentiva la adopción de alternativas más limpias, como el gas y la energía solar, pues las empresas y las personas no encuentran razones económicas para migrar hacia ellas.
Si se permitiera que el diésel y la gasolina alcanzaran valores de mercado sin interferencia de subsidios, estos combustibles se volverían más costosos y harían competitivas a las energías limpias. Esto incentivaría a los usuarios a cambiar paulatinamente sus hábitos de consumo hacia opciones ambientalmente sostenibles.
Beneficios de la transición energética
A pesar de las barreras, la transición energética ofrece beneficios significativos que hacen que valga la pena el esfuerzo por llevarla a cabo.
En primer lugar, la transición energética tiene un enfoque claro en la sostenibilidad ambiental. Como afirma el Gerente General de Empresas Gasco, «La prioridad es el medioambiente, porque no tenemos otro sitio donde vivir». Este enfoque en la sostenibilidad es esencial para asegurar un futuro habitable para las generaciones futuras.
Además, la transición energética ofrece ventajas en términos de confiabilidad. Como señaló Morales, en las áreas rurales, la confiabilidad en el suministro eléctrico puede ser un problema.
La generación de energía descentralizada y la capacidad de las empresas para producir su propia energía pueden brindar opciones más seguras y estables, y reducir la dependencia de la infraestructura eléctrica centralizada. Esto es especialmente importante en regiones donde los cortes de energía son frecuentes.
¿Cómo se equilibran los costos y beneficios de la transición energética?
Para lograr la viabilidad de la transición energética, es necesario equilibrar la relación costo-beneficio. Empresas Gasco, por medio de su filial G+Energy, propone un modelo para hacer este proceso más atractivo, sin que los clientes tengan que hacer la inversión.
G+Energy se ofrece como proveedor de energía, instala el sistema y asume la inversión inicial. «Imaginemos que una empresa paga 300 pesos por kilovatio de energía. Lo que nosotros ofrecemos es convertirnos en su proveedor de energía. Instalamos un sistema de energía solar en su techo, en su bodega, en el patio que tenga, en el parqueadero, en la zona en donde se disponga y funcione mejor, y nosotros de ahora en adelante le vamos a vender esa energía», explica Morales.
A cambio, ofrecen al cliente energía a un precio menor al que pagan actualmente en la red, con descuentos que podrían rondar entre el 15 y el 20%, dependiendo de las condiciones del contrato. De esta manera se puede justificar la inversión sin que los clientes tengan que asumir los costos de instalar los equipos de generación.
Además, el cliente no se desconecta de la red eléctrica tradicional: como el sol solo sale de día, sólo consumirá la energía solar durante las horas de luz y en la noche consumirá la de la red. «Estos son los mecanismos que nosotros como empresa usamos para invitar a otras compañías a que consuman una energía limpia».
El ejecutivo de Empresas Gasco destaca que, además, están complementando el uso de la energía solar con otras energías limpias como el Gas Licuado GLP, para ayudar a las empresas a migrar a un modelo energético más económico y sostenible.
El futuro de la transición energética en Colombia
El Gerente General de Empresas Gasco considera que para que la transición energética en Colombia sea exitosa es fundamental establecer políticas que incluyan a todos los actores clave.
Estas políticas deben ofrecer incentivos económicos reales para migrar hacia tecnologías más limpias y sostenibles. Si se ofrecen ventajas económicas tangibles, se fomentará la adopción de estas tecnologías y se acelerará la transición energética.
Además, la transición energética debe ser un proceso gradual que tenga en cuenta tanto los costos como los beneficios a corto y largo plazo. Para lograrlo, es necesario diversificar la matriz energética del país. Esto implica aprovechar una combinación de fuentes renovables, como la energía solar junto con otras soluciones limpias como el Gas Licuado GLP.
Conclusiones
«Creo que la mejor transición es un paquete que tenga una cantidad de opciones entre las que se pueda escoger. Esto no es un juego blanco o negro. No es que una cosa no sirve y la otra sí sirve». Para el Gerente General de Empresas Gasco, todas las opciones ayudan y cada logro es fundamental para garantizar la confiabilidad del sistema energético.
Para demostrar su punto, Morales destacó el caso de Alemania, uno de los países que más ha avanzado en la transición energética. Desde hace tiempo, este país europeo se ha volcado a las energías renovables y ha sacado de su matriz energética a muchos de los combustibles fósiles.
Sin embargo, con la guerra en Ucrania, los alemanes han tenido problemas de suministro de gas, lo que les llevó a encender nuevamente las plantas térmicas y a comprar carbón. Entonces, un combustible fósil, que no es necesariamente malo pero que produce emisiones, terminó por salvar a Alemania de una crisis energética.
«¿Cuál es el mensaje aquí? Que no hay cosas buenas y cosas malas. Claro, hay unas cosas que hacen más daño que otras… Pero lo que es fundamental es que se debe tener un portafolio de opciones que puedan usarse cuando se las necesite. ¿Por qué? Porque las cosas cambian permanentemente», afirmó.
El Gerente General de Empresas Gasco concluye diciendo que lo peor que puede suceder es no contar con opciones energéticas. La discusión sobre las energías muchas veces se centra en «satanizar» una alternativa energética en favor de otra, cuando lo importante es tener un abanico de opciones disponibles. De este modo, se pueden elegir las opciones que mejor se adapten a cada momento y circunstancia, y que minimicen el impacto ambiental.
Al contar con diferentes opciones en la matriz energética, es posible progresar de manera gradual hacia fuentes más sostenibles. La clave está en no descartar alternativas y en aprovechar sus ventajas según el contexto, con el objetivo final de mejorar paulatinamente el perfil ambiental del sector energético.
Puntos importantes:
La transición hacia fuentes de energía más limpias y renovables es uno de los mayores retos a los que se enfrenta el mundo.
Para que sea viable, la transición energética implica encontrar el equilibrio entre sus costos y sus beneficios.
Una barrera importante en la transición energética colombiana es la dependencia de los subsidios a los combustibles fósiles como el diésel y la gasolina
La generación de energía descentralizada y la capacidad de las empresas para producir su propia energía pueden brindar opciones más seguras y estables.
La transición energética debe ser un proceso gradual que tenga en cuenta tanto los costos como los beneficios a corto y largo plazo.