La industria avícola experimentará un gran crecimiento en los próximos años. Según previsiones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), para 2032 el consumo de carne de aves aumentará un 15% a nivel mundial, llegando a representar para ese año el 41% de la proteína animal total consumida: la más importante.
Este desarrollo del mercado supone grandes retos para las empresas, que van desde una mayor tecnificación hasta buenas prácticas que incluyan estándares de salubridad para las aves.
En este contexto, es imprescindible para todo criadero aplicar medidas de prevención parasitológicas con el fin de reducir la mortalidad de los animales y brindarles un desarrollo óptimo. Los empresarios de la industria avícola necesitan detectar tempranamente enfermedades, comprender los ciclos de vida de los parásitos, evitar la transmisión de virus y bacterias entre las aves, conocer los efectos que les provocan y desarrollar estrategias de control.
Afecciones más frecuentes en las aves
Según Avinews, gran parte de la mortalidad avícola se encuentra relacionada con la osteoporosis, enfermedad cuya incidencia en las aves afectadas supera el 50% en Latinoamérica. Esta afección puede ser causada principalmente por deficiencias nutricionales, factores ambientales y estrés.
Otro de los grandes enemigos de los criaderos son los parásitos, que pueden tener un impacto significativo en la salubridad y el desarrollo de estos animales. Existen varios tipos de ellos. Entre los más famosos se encuentran los protozoos, que pueden causar malaria aviar y toxoplasmosis; los helmintos, que son gusanos que pueden infestar el tracto digestivo, el sistema respiratorio y otros órganos; los ectoparásitos, que son insectos y arácnidos que viven en la superficie del cuerpo de las aves (como piojos, ácaros y garrapatas) y que pueden causar irritación, pérdida de plumas y transmitir enfermedades; y los hemoparásitos, que infectan la sangre de las aves.
Por tanto, contar con condiciones óptimas de los corrales se torna fundamental, como una buena aclimatación, al igual que alimento balanceado seco y bebederos templados.
El GLP como mitigante de enfermedades en la industria avícola
Combatir y eliminar estos parásitos en aves de corral requiere de medidas preventivas y control biológico. Entre las más importantes se pueden mencionar la higiene de los galpones (instalaciones limpias y desinfectadas, libres de insectos y otros vectores —artrópodos, como garrapatas y piojos—, y con temperaturas adecuadas) y la correcta nutrición de los animales. En este sentido, el GLP puede jugar un papel trascendental en la salubridad de los animales por su versatilidad.
Este combustible puede utilizarse en los criaderos como calefacción, cocina, para la generación de energía, refrigeración e iluminación, las 24 horas los siete días de la semana.
El poder calorífico del GLP, superior al del gas natural, puede aprovecharse para aclimatar los galpones, evitando la presencia de parásitos y proliferación de bacterias que afectan a los animales. Este energético también se utiliza para calentar incubadoras que mantienen una temperatura adecuada para los huevos y las aves recién nacidas. Los pollitos, especialmente durante el periodo de cría, requieren un control preciso de la temperatura que oscila entre 31 y 34°C durante los primeros días, clave para el ciclo de desarrollo de las aves.
Además, la climatización óptima en los galpones, facilitada por el GLP como una de las mejores soluciones energéticas para este fin gracias a su precisión en el control de temperatura, también reduce el estrés térmico, conocido por reducir la productividad, afectar la fertilidad y aumentar la susceptibilidad a enfermedades en las aves.
Otro aporte del GLP es contribuir a una nutrición correcta de las aves. Por su versatilidad, este combustible es capaz de abastecer hornos, calderas y otros dispositivos utilizados en el procesamiento de alimentos avícolas. Esto ayuda al secado de granos como alimento para estos animales porque, al regular su humedad, previene la proliferación de hongos y bacterias, lo que garantiza que los granos permanezcan frescos y libres de contaminantes.
Además, los equipos de vapor alimentados por GLP pueden emplearse para desinfectar jaulas, bebederos, comederos y otros equipos avícolas. También se pueden aplicar para desinfectar áreas donde se almacena el alimento de las aves, reduciendo así la presencia de plagas como insectos y roedores.
En efecto, un buen ambiente contribuye a la alimentación, sueño, engorde y crecimiento de los animales, lo que mejora la producción de carne y huevos.
Por otro lado, el GLP se utiliza para alimentar generadores que proporcionan electricidad para una adecuada iluminación de los corrales, otro mitigante al estrés de las aves.
En conclusión, el GLP impacta positivamente en la tasa de supervivencia y minimiza las pérdidas por mortalidad. Gracias a su versatilidad y poder calorífico, ayuda a prevenir las enfermedades y a mejorar el rendimiento de estos animales, garantizando un estándar de calidad de los productos avícolas.
Unigas, líder en el aprovisionamiento de GLP, brinda soporte a las empresas de la industria avícola, proveyendo este energético. La compañía da asesoramiento gratuito, garantizando una producción más eficiente y económica para sus clientes.
Más ventajas del GLP respecto a otros combustibles
Un beneficio adicional del GLP es que evita el despilfarro de energía, mejorando la eficiencia y rentabilidad. De acuerdo con la Asociación Colombiana del GLP, este energético es más eficiente que otros combustibles, como la gasolina y el aceite combustible para motores (ACPM), y produce un 20% menos de huella de carbono para calefacción que este último, impactando de menor manera en el medioambiente; en relación al carbón, el GLP genera un 50% menos de emisiones de CO2.
Asimismo, el GLP es más fácil de almacenar y transportar que el gas natural, ya que se guarda en tanques o cilindros y se puede distribuir en camiones cisterna gracias a su estado líquido.
Conclusiones:
La parasitología es clave para prevenir enfermedades y mejorar la productividad de la industria avícola.
En todos los procesos, el GLP ayuda a los criaderos contribuyendo a mejorar la eficiencia, productividad y calidad de los procesos y productos utilizados, lo que mejora la salubridad de las aves
Su eficiencia energética, control preciso de la temperatura, facilidad de uso, seguridad y versatilidad convierten al GLP en una opción atractiva para la crianza de aves, implementando métodos de producción sostenibles, seguros y ambientalmente responsables.
Fuentes:Apellido, Iniciales. (Año, Día y Mes). Título del artículo. Nombre del blog. URL
Unigas (2024). Innovación: cómo el gas licuado está cambiando la avicultura. https://www.unigas.com.co/blog/innovacion-como-el-gas-licuado-esta-cambiando-la-avicultura/
Unigas (2024). El gas licuado en la producción avícola: competitividad y eficiencia. https://www.unigas.com.co/blog/el-gas-licuado-en-la-produccion-avicola-competitividad-y-eficiencia
Gasnova (2020). El GLP en la industria avícola y la ganadería. https://www.gasnova.co/el-glp-en-la-industria-avicola-y-la-ganaderia/
Gasnova (2024). El GLP en la transición energética. https://www.gasnova.co/transicion-energetica-porque-el-glp-es-considerado-un-combustible-limpio/
Avinews (S/F). Mortalidad avícola, una herramienta útil para las explotaciones. https://avinews.com/caracterizacion-de-la-mortalidad/
Avinews (2023). Adoptando medidas de seguridad alimentaria en el procesamiento avícola. https://avinews.com/adoptando-medidas-de-seguridad-alimentaria-en-el-procesamiento-avicola/
Universidad de Georgia (2022). Environmental Factors to Control when Brooding Chicks. (Factores ambientales a controlar durante la crianza de pollitos). https://extension.uga.edu/publications/detail.html?number=B1287